LOS REYES TRAEN CARBON A LA PENYA

PENYA XERACO 0 – 2 BAR CASA OBELIX

ALINEACION CASA OBELIX
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Alineación: Paco (2); Gato (1), Alex(1), Rafa, Pons(2); Juanet(2), Boro(2), Payo(2), Jordi(1), Poler(2); Dani(1)

Cambios: Miguel(2), Alan(1)

Mister Vana(2).

Se disputaba la jornada atrasada del pasado día 18 ante el Bar Casa Obelix, que fue suspendido a causa de la lluvia, en una jornada un tanto atípica y a un horario que no invitaba a la asistencia de jugadores, después de la noche de reyes. Así pues, con éste panorama y con 12 jugadores (Alan llegó con el partido comenzado), la Penya debía enfrentarse a uno de los mejores equipos de la categoría con la falta de un montón de jugadores de los que solo unos pocos tenían compromisos ineludibles y habían avisado. De todos modos, solo decir que somos todos los que estamos, y allá el resto…..

Una vez hecha la reflexión anterior, pasemos a relatar como transcurrió el partido, del que también merece la atención reseñar que nos volvieron a enviar (y espero que sea la última vez), al “fenómeno” de arbitro del partido ante el Cerv. Eduard……sí, el mismo personaje maleducado que ésta vez soltó una de sus perlitas “¡¡poneros un bozal!!” cuando le reclamaron una falta y tarjeta clarísima al central rival, que por supuesto no sacó……Afortunadamente, y sin ser un buen arbitraje, al menos no influyó en el resultado y juego.

Comenzaba el partido con el guión establecido, es decir, con la Penya agazapada atrás, y cediendo el balón a un Bar Casa Obelix muy superior en el manejo del balón, debido a su técnicamente superior centro del campo, donde volvió a erigirse como mejor jugador el número 6, bien secundado por el número 8 en misiones más defensivas. Así trascurrieron los 15 minutos, con el balón en poder del rival, pero con una Penya tratando de salir rápido por bandas, donde Jordi y Poler, se asociaron alguna vez en buenas combinaciones con Dani Dentol, quien cumplió como delantero centro, y con un Dani Payo, que era el jugador sobre el que debía caer todo el peso ofensivo del equipo.

Trascurrido ese primer cuarto de hora, donde la Penya se defendía correctamente en los balones a la espalda, y donde Pons sufrió más la insistencia de los ataques rivales por su banda, que Gato, quien dispuso de un partido bastante plácido y bien resuelto, llegó la jugada que cambió el partido. Y digo que cambió el partido, porque en un error garrafal de marca de toda la defensa que basculó al primer palo, el número 9 rival remataba dentro del área pequeña un balón peinado, y conseguía el primer gol.

Digamos que a partir de entonces, si bien la Penya no dominó, si que se “soltó”, y por fin el centro del campo comenzó a funcionar, con un Payo que comenzó a generar problemas con la salida del balón (sufriendo la dureza de los rivales en alguna ocasión), y con unos buenos escuderos en el mediocampo en la figura de Juanet, que repartió también juego en la primera parte (mejor que en la segunda), y un Boro que hasta el final de la primera parte, supo sacrificarse por el equipo y se convirtió en la sombra del numero 6 rival, impidiéndole que jugara cómodo como hasta el momento.

Así trascurrió el tiempo hasta el final de la primera parte, con alguna combinación buena por banda de Jordi, alguna internada meritoria de Dani, y un saque de falta de Jordi que se marchó manso fuera. Por el contrario el Bar Casa Obelix solo generó peligro en un par de balones regalados por la Penya en la salida que permitieron que el dorsal 6 rematará desde lejos un balón cerca de la escuadra, y que el lateral derecho, estrellara el balón en el lateral de la red en una internada.

La segunda parte comenzó un poco como acabó, aunque el rival bajó un poco la intensidad del dominio, y una Penya que siempre trató de jugar el balón, máxime ahora que había retornado al equipo Alan (aunque lejísimos de su nivel habitual), consiguieron igualar el partido. Aun así el partido, siempre estuvo más cerca del 0-2 que del empate, sobretodo después de dos ocasiones clarísimas del numero 11 a dos pases milimétricos a la espalda de los centrales del numero 6, y que permitieron encaran a Paco solo, aunque en la primera ocasión Paco hizo una parada sensacional desviando lo justo el remate para que impactara en el palo, y en la segunda entorpeciendo lo justo al delantero rival en su salida, al que llegó a tocar y desequilibrar (por tanto penalti), pero que éste pudiendo terminar en gol la jugada, incomprensiblemente se dejó caer, a lo que el arbitro decidió castigar con amarilla para el delantero rival.

La Penya en la segunda parte, llevó peligro en alguna internada por banda de Boro (ahora como interior) y Gato, y sobretodo en un remate de Alan que se marchó rozando la escuadra, aunque como siempre es muy poco bagaje para un equipo que no genera ocasiones, y por tanto es complicado que gane partidos pese a que defienda con orden y solvencia.

El segundo gol de Casa Obelix es una mera anécdota, ya que llegó en el último instante del partido, y tras un fallo de Dani Payo que trató de regatear perdiendo el balón dentro de nuestra área, dejaba solo al dorsal 11 que tras un paradon de Paco, aprovechaba el regalo del rechace para marcar a puerta vacía.

La conclusión es clara, pocas ocasiones de gol, poco banquillo (la gente no asiste), y partidos contra buenos equipos, solo pueden llevar a derrota,….., y pese a ello la Penya casi siempre da buena imagen, como en este partido.