A LA PENYA LE SOBRÓ CON LA PRIMERA PARTE

Penya Xeraco 4 – 1 Penya Daimus.

Alineación:Jose; Miguel, Planes, Rafa, Bernat; Garic, Capi, Mario, Nando, Borja(1); Juanjo (3).

Cambios: Jordi, Noel.

El pasado domingo se enfrentaban dos equipos necesitados, que todavía no habían puntuado en la presente Liga, y que acabaron presentando un encuentro desigual.

 La Penya Xeraco comenzó muy metida en el partido, con una intensidad como no se le recordaba, ni había visto, hacía tiempo, y ello provocó que en tan solo 15 minutos se adelantara en el marcador en dos ocasiones. La primera de ella en una combinación fulgurante en el centro del campo que tras gran pase de Capi (que como decía Mario ayer, “sacó a pasear el exterior”) asiste al gran desmarque de Juanjo, que se planta solo ante el portero rival superándole con facilidad.

 

Casi sin tiempo a recuperarse, de nuevo balón jugado desde atrás que llega a Garic, quien, con una potencia descomunal, arranca por banda derecha marchándose de toda la defensa, y colocando un balón que se pasea por el área pequeña, para que el joven Borja llegue al segundo palo y remache casi a puerta vacía.

Lejos de relajarse, y con el camino aprendido, la Penya siguió entrando por el centro de la defensa rival como "cuchillo en la  mantequilla", con un gran Capi, y sobre todo Mario, que dominó el tempo del partido y llevó la manija en todo momento.

 

Mientras tanto, el Daimus, que hay que decir que siempre trató de salir con el balón jugado desde atrás y trato de proponer un juego de toque con un par de buenos jugadores en medio campo, se acercaba en algún balón peligroso en largo, que propició algún remate lejano o centro con cierto peligro que acabó paseándose por el área pequeña de Jose, quien dicho lo cual no sufrió en toda la primera parte, más allá de algún despeje por alto a balón parado. Destacar que la hoy veterana defensa (más de 170 años acumulados) solo sufrió en la primera parte un poco por la zona derecha de Miguel, que aun así consiguió defenderse como “gato panza arriba” empleándose, eso sí, a fondo.

 

En estas y con ya bien entrada la primera parte, de nuevo combinación en el centro de Nando (quien poco a poco va cogiendo ritmo y participando cada vez con más importancia) que tras combinar en pared con Juanjo, asiste magníficamente a éste para que supere al portero de vaselina en su salida. Nuevo golpe para el Daimus, y máxima efectividad de la Penya que volvía a golpear sin piedad.

Y cuando parecía que la primera parte acabaría sin más novedad, de nuevo una gran asistencia de Capi con el exterior a la espalda de la defensa para la carrera de Juanjo, quien en segunda instancia, y tras detener su primer remate el portero del Daimus, aprovecha el rechace para poner el 4-0 en el marcador, y firmar su primer “Hat Trick” de la temporada.

En la segunda parte en cambio, la historia cambió radicalmente, y toda la efectividad de la Penya y juego eléctrico demostrado, se transformó en un ritmo más pausado, rozando casi lo cansino, y que a pesar de la entrada de Jordi y Noel, no logró mantener el control del mediocampo que quedó en manos del Daimus, que en esta segunda parte, y merced a la inclusión de sus 3 cambios, acabó dominando y percutiendo esta vez por la banda de Bernat, quien también mantuvo el tipo con solvencia.

Aun así, sería justo decir que ninguna de las dos Penyas llegó con claridad a las dos áreas, y solo algunos “arreones” de Garic y Borja por banda (demasiado generosos asistiendo en ocasiones en vez de disparar), y un Juanjo más cansado y desacertado, junto con varias internadas de los delanteros del Daimus con mucha movilidad, apenas generaron peligro para los porteros. En una de esas internadas, en un balón mal iniciado por la Penya con posterior robo, y un mal despeje hacia atrás, provoca que el extremo derecho del Daimús gane la espalda del lateral, y centre al segundo palo para una llegada del delantero rival que remata a bocajarro ante el Gato, que nada puede hacer.

 A partir del gol, la verdad que incluso el equipo visitante pareció conseguir lo que buscaba (que era el gol del honor), y ya no inquietó más la portería de la Penya, defendida en esta segunda parte por el Gato, que casi al final le puso un poco de “salsa” al partido, en una salida con mucho riesgo que pudo provocar tras un rechace demasiado corto, que el equipo rival hubiera conseguido el segundo, circunstancia que sin duda hubiera sido demasiado premio para los visitantes.

En resumen, partido notable de la Penya en la primera mitad, que no pudo mantener la imagen en la segunda, en parte debido al cansancio, y en parte debido a la relajación por lo abultado del marcador.